“Érase una vez un Ángel que del Cielo quiso bajar a
Un día agarré mi media nube y mis gafitas (esas que Dios me ha dado) y fui a vivir a un lugar indeterminado entre la metáfora y el surrealismo. Desde entonces, estoy pagando la hipoteca con poemas, cuentos, relatos, novelas, dibujos, pinturas, fotografías… ¡canela fina! y otras especias.
Poco a poco o mucho a mucho, dependiendo del día, estado de ánimo y condiciones atmosféricas, suministraré género del bueno, fabricado a mano, con amor, humor y pasión.
Porque te quiero. Porque todo lo que hago es pensando en ti y con el corazón… de la única forma que sé vivir. Y estoy en ello, dispuesta a seguir haciéndolo con muchas ganas, para que tú lo puedas disfrutar. Ojalá sea así.
26 jul 2016
EL SONÁMBULO
-Que resulta que ando dormido y durmiendo.-Responde el marido, entre dientes.
-Ya… Lo mismo le pasaba a mi tío abuelo, el pobre, que en la gloria esté. Y a partir de aquella noche en que le esperó el rodillo de mi tía abuela, tras la puerta de la entrada, después de seis horas de no saber por dónde sonambuleaba, ya no volvió más a ser sonámbulo.
-Mujer, no me digas esas cosas que despierto aterrado.
-Pues entonces, más te valdría subir a casa enseguida y… desacompañado. Lo digo por esa joven, tan ligera de ropa que va a tu lado que, supongo, también será sonámbula, y querrá volver a la suya.
Ángeles Córdoba Tordesillas ©
No hay comentarios:
Publicar un comentario