Desde mi nube y con gafitas

“Érase una vez un Ángel que del Cielo quiso bajar a la Tierra para experimentar lo que era ser humano. Adoptó la forma de mujer. Sólo bajó con lo puesto… unas preciosas gafitas que Dios le había regalado y una nube pequeña, desde donde miraba cada día todo lo que sucedía entre el Cielo y la Tierra. Sólo a través de esas gafitas podía ver nítidamente el mundo y a las personas que vivían en él. Sin ellas se sentía desorientada, perdida, pues todo se volvía invisible e incluso ella misma, ya que ni siquiera podía percibir su propio cuerpo. Esta historia está contada por ese ángel que, a través de la narración de sus peculiares observaciones, intenta representar el mundo que ve.”

Un día agarré mi media nube y mis gafitas (esas que Dios me ha dado) y fui a vivir a un lugar indeterminado entre la metáfora y el surrealismo. Desde entonces, estoy pagando la hipoteca con poemas, cuentos, relatos, novelas, dibujos, pinturas, fotografías… ¡canela fina! y otras especias.

Poco a poco o mucho a mucho, dependiendo del día, estado de ánimo y condiciones atmosféricas, suministraré género del bueno, fabricado a mano, con amor, humor y pasión.

Porque te quiero. Porque todo lo que hago es pensando en ti y con el corazón… de la única forma que sé vivir. Y estoy en ello, dispuesta a seguir haciéndolo con muchas ganas, para que tú lo puedas disfrutar. Ojalá sea así.

27 ene 2015

AMOR COMPARTIDO

No es mediocre el acento
en nuestro romance
a borbotones.
No es mediocre, confieso,
que no sé, no ponerlo.
Ni es metáfora el querer
contemplar tus silencios.
O desear compartir,
tus anhelos privados.
Y tal vez arrancar
tus temores,
arraigados,
como árboles pegados
a la tierra madre
o agua a los mares.
Déjame ser espectadora
de tu renacimiento
cada día,
a la vida, al amanecer
de este amor
compartido.
Creo que no es pecado
ni nada de eso…
Yo no necesito príncipes
que desentrañen sapos,
ni hechizos ni sortilegios,
más que los de tus besos
y algún que otro abrazo.
La mejor manta
para arroparme.
Ya voy teniendo sueño,
mi amor,
y ganas de soñarte...
Creo que es la hora
de acostarse.

Ángel C. T. © 2015 

6 comentarios:

  1. Siempre me emocionan tus poemas. Estos tan hermosos de amor, me calan hasta el tuétano, me erizan el vello. Y los vuelvo a leer, dos, tres veces....., a veces en voz alta, y me vuelvo a emocionar.

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  2. Fátima Reyes García.28 de enero de 2015, 0:55

    Realmente precioso!!

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  3. De la carcajada al estremecimiento, siempre tocando todas las teclas emocionales... ¡Cómo te cuadra lo del "emocionalismo"!

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