Fotografía hecha con estas gafitas que Dios me ha dado. |
“Érase una vez un Ángel que del Cielo quiso bajar a
Un día agarré mi media nube y mis gafitas (esas que Dios me ha dado) y fui a vivir a un lugar indeterminado entre la metáfora y el surrealismo. Desde entonces, estoy pagando la hipoteca con poemas, cuentos, relatos, novelas, dibujos, pinturas, fotografías… ¡canela fina! y otras especias.
Poco a poco o mucho a mucho, dependiendo del día, estado de ánimo y condiciones atmosféricas, suministraré género del bueno, fabricado a mano, con amor, humor y pasión.
Porque te quiero. Porque todo lo que hago es pensando en ti y con el corazón… de la única forma que sé vivir. Y estoy en ello, dispuesta a seguir haciéndolo con muchas ganas, para que tú lo puedas disfrutar. Ojalá sea así.
Más allá de una alambrada la posibilidad de poder tener una vida mejor en el Primer mundo, si es que a día de hoy sigue siendo Primer mundo. Algún día viviremos sin fronteras ni físicas ni imaginarias donde todos seamos iguales; al igual que el discurso que hizo Martin Luther King en Washington, yo también "he tenido un sueño.".
ResponderEliminarEs bonito tu discurso, Sergi. En este caso, la alambrada es metafórica. Se refiere más bien a que las limitaciones y obstáculos personales, a veces dados por las circunstancias externas, a veces por las propias,que aunque interfieran en nuestra libertad de movimientos, no impiden la posibilidad de soñar que eso que deseamos se haga realidad. Para cada, uno esa alambrada está hecha de diferente material; miedos, prejuicios, recelos, resentimientos, inseguridades... Al igual que, cada cual, difiere en sus sueños. Gracias por tu aportación.
EliminarPrecioso haiku Ángel,acompañando a la foto,que es una belleza.
ResponderEliminarGracias Fátima. La fotografía es de esta misma tarde. Un besito.
EliminarPrecioso haiku Ángel,acompañando a la foto,que es una belleza.
ResponderEliminarVerás como un día de estos cortamos esa alambrada con unos alicates bien fuertes y damos ruenda suelta a nuestros sueños. De momento, gracias por compartir parte de ellos, Angel. Un beso
ResponderEliminarSeguro que sí, Susana. Pero en vez de alicates yo prefiero utilizar mis pinceles y útiles para escribir. Es la mejor manera que he encontrado, hasta ahora, de eliminar alambradas inútiles.
EliminarGracias por tu incondicional cooperación para "dar rienda suelta" a nuestros sueños.
Estoy convencido que podrás atravesar esa alambrada siempre que se te presente y te lo propongas, porque valoras la libertad por encima de cualquier otra cosa.
ResponderEliminarAsí es. Oh la la, la liberté!
EliminarGracias Manolo.
Siempre en libertad, desde luego.
ResponderEliminarY ser fiel a uno mismo.
Un beso!!