para que me echaras el lazo.
Ángeles Córdoba Tordesillas ©
“Érase una vez un Ángel que del Cielo quiso bajar a
Un día agarré mi media nube y mis gafitas (esas que Dios me ha dado) y fui a vivir a un lugar indeterminado entre la metáfora y el surrealismo. Desde entonces, estoy pagando la hipoteca con poemas, cuentos, relatos, novelas, dibujos, pinturas, fotografías… ¡canela fina! y otras especias.
Poco a poco o mucho a mucho, dependiendo del día, estado de ánimo y condiciones atmosféricas, suministraré género del bueno, fabricado a mano, con amor, humor y pasión.
Porque te quiero. Porque todo lo que hago es pensando en ti y con el corazón… de la única forma que sé vivir. Y estoy en ello, dispuesta a seguir haciéndolo con muchas ganas, para que tú lo puedas disfrutar. Ojalá sea así.
Nena éste lo has bordao, a mi me dicen eso, y me enamoran pa'toa la vida jijjiji
ResponderEliminarAnda, pues ya estás dando pistas claras a tus pretendientes, Fátima. A ver si te echan un buen lazo de esos que llevan regalo dentro (a la inversa del recibido el otro día por una que yo me sé...)
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ResponderEliminar¡¡Me encantan esos piropos!!
La pena que el piropeo bonito se esté perdiendo.
Pues yo estoy dispuesta a encontrarlo... He salido a buscarlo como una loca. Me gustan mucho, también, Arantza. Seguiré, pues, componiendo como una posesa, piropos à tout á l'heure. ¡¡¡Gracias preciosura!!!
EliminarEsta clase de piropos, tan originales, tan frescos, yo creo que nunca deberían perderse, y tu Ángel, los dices preciosos.
ResponderEliminarGracias, Manolo. Salen improvisados.
EliminarUna costumbre que no debería perderse esta de los piropos, dichos, eso si, con respeto. Muy bueno este de la zapatilla ;)
ResponderEliminar¡Muchas gracias, Chema!
EliminarLas zapatillas siempre son fuente de inspiración.