Desde mi nube y con gafitas

“Érase una vez un Ángel que del Cielo quiso bajar a la Tierra para experimentar lo que era ser humano. Adoptó la forma de mujer. Sólo bajó con lo puesto… unas preciosas gafitas que Dios le había regalado y una nube pequeña, desde donde miraba cada día todo lo que sucedía entre el Cielo y la Tierra. Sólo a través de esas gafitas podía ver nítidamente el mundo y a las personas que vivían en él. Sin ellas se sentía desorientada, perdida, pues todo se volvía invisible e incluso ella misma, ya que ni siquiera podía percibir su propio cuerpo. Esta historia está contada por ese ángel que, a través de la narración de sus peculiares observaciones, intenta representar el mundo que ve.”

Un día agarré mi media nube y mis gafitas (esas que Dios me ha dado) y fui a vivir a un lugar indeterminado entre la metáfora y el surrealismo. Desde entonces, estoy pagando la hipoteca con poemas, cuentos, relatos, novelas, dibujos, pinturas, fotografías… ¡canela fina! y otras especias.

Poco a poco o mucho a mucho, dependiendo del día, estado de ánimo y condiciones atmosféricas, suministraré género del bueno, fabricado a mano, con amor, humor y pasión.

Porque te quiero. Porque todo lo que hago es pensando en ti y con el corazón… de la única forma que sé vivir. Y estoy en ello, dispuesta a seguir haciéndolo con muchas ganas, para que tú lo puedas disfrutar. Ojalá sea así.

18 jun 2015

JUGUEMOS

Amor, tú que sabes
dónde y cuándo debe latir el corazón amante,
el que no retrocede ante peligrosos enemigos,
digo temores, por ejemplo, y digo males.

Tú, que sabes, mejor que nadie,
cómo volar en las noches de luna llena,
con el alma gemela de la mano,
que estás invitado a la fiesta
de mi pasión permanente,
donde me invento sueños con encajes,
juega conmigo ahora, que ya somos adultos
y no niños obedientes.

Vamos a caminar descalzos,
sin miedo a mancharnos
con el barro del deseo,
a saltar en los charcos del descaro,
a sucumbir a los encantos de la carne.

No tengas pereza, amor, por enseñarme.

Juguemos que no hay prisa…
ya hace tiempo que se nos hizo tarde.

Ángel C. T. ©

2 comentarios: